Uno de los ofrecimientos de viaje introductorios más populares de la India es la región del Triángulo Dorado, que incluye tres ciudades populares en la región noroccidental del país: Delhi, Agra y Jaipur. Creando un caleidoscopio de experiencias únicas que deslumbran los sentidos, el viaje comienza en Delhi, avanza hacia el sur hasta Agra y finalmente a los paisajes desérticos de Jaipur.
El Triángulo recibe su nombre de «Dorado» debido a la interesante riqueza cultural, histórica y arquitectónica que se evidencia en el magnífico Fuerte Rojo en Delhi, el majestuoso Hawa Mahal en Jaipur y el impresionante Taj Mahal en Agra. Aquí está nuestra lista de las 10 principales razones para visitar el Triángulo Dorado de la India.
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1- Sumérgete en el esplendor del histórico Fuerte Rojo
Aunque la era mogol ha pasado, el famoso Fuerte Rojo aún perdura con todo su fervor y vitalidad. Construido por el Emperador mogol Shah Jahan, este magnífico fuerte fue nombrado «Rojo» por sus inusuales paredes de arenisca.
Ubicado en la Vieja Delhi, este masivo fuerte octogonal no solo es un gran punto de partida para una aventura en el Triángulo Dorado, sino que también ofrece una oportunidad única en la vida para redescubrir el fascinante mundo de los mogoles y los maharajás.
2- Descubre la Torre del Poder: Qutub Minar
Ven y observa el minarete de ladrillos más alto del mundo, que casi rivaliza con el Taj Mahal en popularidad. El Qutub Minar es una maravilla arquitectónica medieval y posiblemente uno de los monumentos más impresionantes de todos los tiempos.
Construida en 1193, la Torre del Poder está inevitablemente asociada con el ascenso del dominio islámico en la India. De hecho, la base del minarete cuenta con la primera mezquita islámica de la India, con monumentos y jardines embelleciendo los terrenos.
3- Acepta la «unidad de la humanidad» en el Templo del Loto
Durante tu viaje al Triángulo Dorado, asegúrate de visitar el Templo del Loto o la Casa de Adoración Bahá’í, donde te espera una impresionante pieza de arquitectura moderna. Aunque el templo está ubicado en un lugar austero, a diferencia de las ruinas antiguas que salpican Nueva Delhi, atrae a más de cuatro millones de visitantes cada año.
El templo se asemeja a una flor de loto parcialmente abierta que consta de 27 hojas y exquisitos pétalos de mármol. La vista arquitectónica es magnífica, ya que los nueve estanques que representan hojas de loto dan la impresión de una flor reposando sobre el agua.
A diferencia de otros templos en la India, el Templo del Loto no alberga sacerdotes o ídolos en su interior, sino que abraza la unidad de la humanidad, la religión y Dios. Es uno de los principales lugares de culto de la Fe Bahá’í, que comenzó en Irán a mediados del siglo XIX.
4- Enamórate del amor: Taj Mahal
El Taj Mahal en Agra seguramente se mencionará en cualquier cosa que leas sobre el tour del Triángulo Dorado. Este magnífico santuario es más que arquitectura o historia; es un testimonio de amor tan puro como el mármol blanco con el que está construido.
Aunque las personas asociadas con la historia del Taj Mahal provienen del siglo XVII, la idea del amor es atemporal e inspira a personas de todo el mundo a visitar esta magnífica creación.
5- Fatehpur Sikri: Ciudad Imperial Fantasma
Ubicada a 37 kilómetros de Agra, Fatehpur Sikri es otro excelente ejemplo de la arquitectura y el aura mogoles que te transportará de vuelta en el tiempo a la era de los Rajas y Maharajas. Los impresionantes edificios de arenisca roja de la ciudad están bien conservados y muestran una arquitectura sofisticada y un inspirador sentido de planificación.
Dado que la ciudad fue abandonada y no repoblada por gobernantes posteriores, es el mejor reflejo de las filosofías de diseño artístico de Akbar. Hoy en día, Fatehpur Sikri es un intrigante pueblo fantasma que refleja la rica y diversa historia cultural de la India.
6- Hawa Mahal: Testimonio del poder y la belleza de Jaipur
En un tour por el Triángulo Dorado de la India, el Hawa Mahal es un lugar que no debes dejar de visitar y que seguramente te impresionará. Ubicado en el corazón de la hermosa Ciudad Rosa de Jaipur, el Hawa Mahal es conocido por su exquisita arquitectura y diseño contemporáneo.
Desde su inicio en 1799 hasta el día de hoy, el palacio conserva la antigua gloria de los reyes Rajput y muestra con orgullo el testimonio del poder de las familias reales de la India. La verdadera belleza del Hawa Mahal, el «Palacio de los Vientos», radica en sus 953 pequeñas ventanas talladas intrincadamente que regulan el flujo de brisa en todo el palacio y lo mantienen fresco incluso en el caluroso verano. De hecho, esta maravilla en forma de pirámide ha demostrado ser uno de los sitios más visitados en Rajasthan por los turistas.
7- Retrocede en el tiempo con el sello de Jaipur: «Jantar Mantar»
Uno de los lugares que debes visitar en tu viaje al Triángulo Dorado en Jaipur es el observatorio astronómico más grande de la India, que cuenta con una amplia gama de mecanismos modernos. Estos observatorios o ‘Jantar Mantars’ con sus impresionantes colecciones de formas geométricas han captado la atención de artistas, arquitectos, historiadores del arte y el público en general en todo el mundo.
8- Una experiencia de compras única
La mejor manera de explorar la atractiva vitalidad del Triángulo Dorado es comprar entre el colorido caos de los mercados indios. Desde divertidos y auténticos recuerdos hasta una variedad deslumbrante de joyas y artesanías hechas localmente, el Bazar de la Vieja Delhi es una atracción turística en sí misma.
¿Y qué más? Prueba parte del patrimonio cultural de Jaipur mientras contemplas productos artesanales locales. O puedes echar un vistazo a las joyas únicas de Agra, las bolsas y sombreros tejidos de paja, pinturas únicas y tallas en madera.
9- Agrega destinos turísticos cercanos a tu lista de deseos
Si estas ciudades históricas han avivado tu deseo de experimentar más de la India, algunos de los destinos turísticos cercanos pueden agregar otra dimensión a tu viaje al Triángulo Dorado.
Los aventureros al aire libre pueden desafiar el calor abrasador en los reinos de la Madre Naturaleza de Shimla, Mussoorie y Nainital, y los entusiastas de la vida silvestre pueden elegir los Parques Nacionales Jim Corbett o Ranthambore para ver una amplia gama de flora y fauna. ¿Y qué más? Los viajeros espirituales pueden experimentar la dicha eterna y descubrir la tranquilidad en Amritsar y Haridwar, mientras que los amantes de la aventura pueden disfrutar de pura emoción y entusiasmo en Rishikesh con una gran cantidad de opciones de rafting y bungee jumping.
10- Degusta alimentos y sabores tentadores
Hemos dejado lo más delicioso para el final. Sin duda, una de las mejores razones para hacer un viaje al Triángulo Dorado de la India es la oportunidad de probar la deliciosa cocina local de Delhi, Jaipur y Agra, que suele considerarse la mejor de toda la India.
La gloria no solo vive y respira en la arquitectura de las Tres Ciudades, sino que también se refleja en su comida. Mientras que la capital, Nueva Delhi, ofrece toda la cocina en un solo restaurante, no te pierdas los sabores callejeros de la ciudad como chaat-papdi, jalebi, golgappas y chai.
Por otro lado, Agra es famosa en todo el mundo por su postre llamado «Pitas», que se puede saborear con diferentes sabores como azafrán, rosa y muchos más. Por último, pero no menos importante; Jaipur es famosa por sus excelentes platos rajasthaníes como ‘Balushashi’ y ‘Dal Bati Churma’.
